Las “Tortas de Pollo” son un platillo mexicano lleno de tradición y sabor. Este guiso se prepara con pechugas de pollo deshebradas que se capean con huevo y se cocinan en una salsa, creando una combinación perfecta entre lo crujiente del capeado y lo jugoso del pollo bañado en la salsa. Es un platillo que se sirve típicamente acompañado de arroz y frijoles, ideal para un almuerzo o una cena que combine sabor y sustancia. La torta de pollo es un clásico que ha pasado de generación en generación, siendo parte esencial de la gastronomía casera mexicana.
Las tortas de pollo, como muchas otras recetas mexicanas, tienen sus raíces en la fusión de ingredientes y técnicas culinarias de diversas culturas. El capeado, por ejemplo, tiene influencias españolas, donde los alimentos se empanizan o envuelven en huevo antes de freírlos. En México, esta técnica se adaptó para crear versiones más robustas de platos tradicionales, como el chile relleno, y en este caso, las tortas de pollo. Este platillo se popularizó en los hogares mexicanos como una comida de domingo o una receta especial para compartir en familia, ganando reconocimiento por su sabor reconfortante y su capacidad para alimentar a muchos comensales con ingredientes sencillos.
Historia de las Tortas de Pollo
Las tortas de pollo tienen sus raíces en la rica y diversa tradición culinaria de México, un país donde la comida no solo es un sustento, sino también una expresión cultural y familiar. Este platillo en particular combina técnicas e ingredientes que reflejan la historia de la cocina mexicana a lo largo de los siglos.
El concepto de “torta” en México no solo se refiere al famoso sándwich, sino también a una variedad de guisos donde los ingredientes principales se capean y se cocinan en salsas que varían según la región y la ocasión. Las tortas de pollo, en este sentido, son un ejemplo de cómo la cocina mexicana ha sabido integrar técnicas europeas, como el empanizado y el capeado, con ingredientes y sabores autóctonos.
El pollo, que llegó a México con la colonización española, se convirtió rápidamente en una proteína clave en la dieta mexicana, combinándose de manera perfecta con los ingredientes nativos como el tomate, el chile y el maíz. El acto de capear el pollo antes de sumergirlo en una rica salsa es un procedimiento que demuestra la influencia de la cocina española en México, mientras que la salsa misma, con su compleja mezcla de chiles, tomates y especias, es un testimonio de la creatividad e ingenio de los cocineros mexicanos.
A lo largo de los años, las tortas de pollo han evolucionado, adaptándose a las preferencias locales y a la disponibilidad de ingredientes. En algunos hogares, la salsa se prepara con chiles secos, en otros con chiles frescos, y la combinación de especias puede variar, lo que convierte a este platillo en un reflejo de la diversidad cultural y regional de México. Esta receta, aunque sencilla en su concepto, ha sido elaborada y refinada a lo largo del tiempo, convirtiéndose en una de las favoritas para reuniones familiares, comidas dominicales y celebraciones especiales.
En muchas regiones de México, las tortas de pollo se asocian con la comida de hogar, esas recetas que las abuelas preparan para consentir a sus nietos y que se transmiten de generación en generación. Es un platillo que trae consigo recuerdos de reuniones familiares, donde la cocina se llena de aromas de salsas cocinándose lentamente y del crujiente del pollo recién capeado. Así, las tortas de pollo no son solo un alimento, sino una conexión con las raíces familiares y la identidad mexicana.
En la actualidad, este platillo sigue siendo popular tanto en los hogares como en las cocinas profesionales, y su versatilidad permite que cada cocinero aporte su toque personal. Ya sea con un toque picante, una salsa más dulce, o una mezcla de ambos, las tortas de pollo se mantienen como una comida que nutre tanto el cuerpo como el alma, evocando el calor del hogar y la riqueza de la cocina mexicana.
Ingredientes
1 pechuga
1 kilo de tomates verdes
1 cebolla
4 dientes de ajo
5 chiles morita
6 huevos
500 gramos de queso panela
Una rama de cilantro
Harina de todo uso
Aceite
Consomé de pollo
Pimienta negra quebrada
sal
Modo de preparación
- En una cacerola con agua agregar los tomates limpios, con un 1/4 de cebolla, 5 chiles moritas y 2 dientes de ajo, una vez cocidos los tomates los reservamos.
- En otra cacerola con agua, 1/4 cebolla, 2 dientes de ajo y sal la ponemos a cocer hasta que esté bien blandita la carne.
- Una vez cocida la carne y que se enfrié deshebramos y reservamos.
- En un recipiente para batir le ponemos las claras de huevo de los 6 huevos, las yemas las reservamos.
- Batimos las claras con el nivel alto, una vez que están bien montadas, agregamos las yemas de huevo y seguimos batiendo con el nivel medio para que no se baje.
- Al pollo deshebrado le agregamos un puño de harina de todo uso para que no se deshagan las tortas y no brinque el aceite.
- El queso panela cortarlo en cuadritos al gusto y lo mezclamos con el pollo.
- Agregamos el pollo y el queso con la harina, al huevo batido, mezclamos con movimientos lentos para no bajar lo esponjado del huevo.
- Una vez bien integrado el huevo y el pollo, en un sartén agregar aceite a que se caliente.
- Ya caliente el aceite hacer las tortas de pollo con la ayuda de un cucharon para que queden redondas.
- Retiras las tortas del aceite y reservamos en unas servilletas absorbentes.
- En la licuadora agregamos los tomates con los chiles morita, una rama de cilantro, licuar bien.
- En una cacerola agregar un chorrito de aceite y 1/4 cebolla en juliana freír la cebolla, una vez blandita la cebolla, agregar la salsa.
- Agregamos un toque de consomé de pollo, pimienta negra recién quebrada al gusto, sal al gusto, mezclar bien y que dejar a que hierva para que sazone la salsa.
- Después del primer hervor la dejamos 15 minutos más, agregamos las tortas de pollo por otros 15 minutos con flama baja. ¡Listo buen provecho!
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Beneficios Nutricionales
Las tortas de pollo, a pesar de ser un plato tradicional y reconfortante, ofrecen diversos beneficios nutricionales cuando se preparan con ingredientes frescos y de calidad:
- El pollo es una excelente fuente de proteínas, fundamentales para la construcción y reparación de los tejidos del cuerpo.
- Al ser cocido en salsa, se pueden incluir ingredientes como tomate, chile, y ajo, que son ricos en antioxidantes y promueven la salud cardiovascular.
- El capeado, aunque es un método de cocción que añade calorías, también aporta energía rápida y satisfactoria, especialmente cuando se equilibra con una porción controlada.
- Si se sirve con arroz integral o frijoles, se añade una buena cantidad de fibra, que es esencial para la salud digestiva y para mantener estables los niveles de azúcar en sangre.
- Es un platillo que puede enriquecerse con guarniciones frescas, como ensaladas, aportando vitaminas y minerales esenciales para una dieta equilibrada.
Incluir tortas de pollo en una dieta balanceada puede ser una forma deliciosa de obtener los beneficios de las proteínas, antioxidantes y otros nutrientes esenciales que este platillo ofrece.
Conclusiones
Las tortas de pollo no solo son un platillo delicioso, sino también una parte importante de la herencia culinaria mexicana. Con su mezcla de texturas y sabores, que van desde lo crujiente del capeado hasta lo suave y jugoso del pollo bañado en salsa, este guiso ofrece una experiencia gastronómica que es a la vez reconfortante y satisfactoria.
Este platillo ha perdurado a lo largo del tiempo, no solo por su sabor, sino también por la versatilidad que ofrece en la cocina mexicana. La posibilidad de personalizar la salsa con diferentes tipos de chiles o agregar ingredientes adicionales según las preferencias familiares, hace de las tortas de pollo un platillo adaptable y querido en muchas mesas mexicanas.
Además, las tortas de pollo son un ejemplo perfecto de cómo la gastronomía mexicana logra transformar ingredientes sencillos en un plato que nutre tanto el cuerpo como el espíritu. Al incorporar este platillo en la alimentación diaria, no solo se disfruta de un manjar tradicional, sino que también se celebra una rica herencia cultural que ha sido transmitida de generación en generación.
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